El estudio REACT, esponsorizado por la British Heart Foundation, reclutó con dificultad extrema a 428 pacientes de los 450 previstos, debido a la creciente preferencia de los clínicos por la angioplastia de rescate. A los pacientes con infarto agudo tratados con fibrinolítico, cuyo ECG a los 90 minutos mostraba una resolución del ST inferior al 50%, con o sin dolor torácico, se les asignó al azar a uno de tres grupos terapeúticos: terapia conservadora con heparina iv, trombolisis repetida (pauta acelerada de tPA o reteplase) o coronariografía, con o sin angioplastia. La tasa combinada de muerte, reinfarto, ictus e ICC a los 30 días (end point secundario) fue significativamente menor en los pacientes sometidos a angioplastia de rescate que en los pacientes tratados de nuevo con trombolítico o tratados conservadoramente.