La existencia de la curva en J, esto es, un aumento paradójico de la morbimortalidad de los pacientes coronarios cuando se reduce excesivamente la TA diastólica ha sido tema de controversia durante años. El corazón se perfunde sobre todo en diastole, por lo que puede ser mas vulnerable a la reducción excesiva de la tensión arterial diastólica.
Los investigadores analizaron los datos del estudio INVEST que comparó 2 regímenes antihipertensivos en 22.576 pacientes con hipertensión y cardiopatía isquémica. Los resultados revelaron la existencia de curvas en J tanto para la TA sistólica como para la TA diastólica, siendo la curva en J de la TA diastólica mucho mas evidente. El nadir en términos de eventos para la TA diastólica se situó en 74 mmHg. Cuando la TA diastólica descendió por debajo de 70 mmHg la mortalidad se duplicó y cuando descendió por debajo de 60 mmHg se cuadruplicó.
Los autores creen que con sus datos se debe empezar a tomar muy en serio la existencia de la curva en J para la TA diastólica en pacientes hipertensos coronarios y evitar los descensos excesivos de la TA diastólica por debajo de 70 mmHg en estos enfermos.
Los que negan la existencia de la curva en J argumentan que el aumento observado de eventos se debe a la existencia de hipertensión sistólica aislada y, por tanto, de una tensión arterial diferencial aumentada.

Messerli FH, Mancia G, Conti R, et al. Dogma disputed: Can aggressively lowering blood pressure in hypertensive patients with coronary artery disease be dangerous? Ann Intern Med 2006; 144:884-893.