Para la mayoría de los aneurismas de la aorta ascedente, la cirugía está indicada cuando el diámetro del aneurisma alcanza o supera los 5.5 cm.

En los pacientes con riesgo quirúrgico elevado (como los ancianos con comorbilidades), es habitual elevar el umbral hasta los 6 cm o mas antes de recomendar la cirugía.

Por el contrario, en los pacientes con riesgo elevado de disección aórtica o rotura aórtica (como los pacientes con Marfan o con válvula aórtica bicúspide) se suele recomendar la cirugía cuando el aneurisma alcanza los 5 cm y en casos seleccionados incluso antes.

Además, cuando los pacientes con una válvula aórtica bicúspide precisan un reemplazo valvular, se recomienda el reemplazo profiláctico de la aorta ascendente si su diámetro es de 4 cm o mayor por el riesgo futuro de disección.

La mortalidad de la cirugía electiva de los aneurismas de la aorta ascendente en centros con experiencia es de 3% a 5%. Se requiere siempre circulación extracorpórea. La cirugía consiste en resecar el aneurisma y colocar un injerto tubular de Dacron del tamaño apropiado.

Cuando el aneurisma afecta a la raiz aórtica y se asocia a insuficiencia aórtica significativa suele procederse a la implantación de un tubo valvulado que se cose directamente al anillo aórtico, reimplantándose las coronarias en el tubo de Dacron (operación de Bentall). Alternativamente, cuando los velos aórticos son estructuralmente normales y la insuficiencia aórtica se debe a la dilatación del anillo, se puede hacer cirugía reparadora, reimplantado los velos aórticos en el tubo de Dacron.

En los pacientes jóvenes con IAo significativa en los que no se desea implantar una tubo valvulado se puede hacer una operación de Ross (extirpación de la válvula y de la raiz aórtica; la válvula y la raiz pulmonar se extirpan y se colocan en posición aórtica; finalmente se coloca un homoinjerto pulmonar o aórtico criopreservado en posición pulmonar).

Isselbacher EM. Thoracic and abdominal aneurisms. Circulation 2005;111:816-28.
[ PubMed ]