Los autores del estudio concluyen que no está indicado el uso rutinario del Swan-Ganz para ajustar la terapia en los pacientes ingresados por ICC crónica descompensada. Además se desconoce con frecuencia como y cuando usar el Swan en estos pacientes.
El Swan no es una terapia en si sino una herramienta para guiar la terapia. Su impacto depende de lo que se hace con la información que proporciona. Sin embargo, los pacientes que no responden a la terapia guiada por signos clínicos o que son hospitalizados repetidamente por descompensaciones de la ICC siguen siendo candidatos a terapia dirigida por Swan.
El estudio SCAPE (Evaluation Study of Congestive Heart Failure and Pulmonary Artery Catheterization Effectiveness) asignó al azar a 433 pacientes con ICC severa sintomática pese a la terapia médica estándar a tratamiento guiado por Swan o guiado por signos clínicos. Se desaconsejó el uso de inotrópicos.
En ambos grupos mejoraron los síntomas y se redujeron la PVY y los edemas. No se detectaron diferencias significativas en el end point primario (días extrahospitalarios vividos en los primeros 6 meses: 133 días con Swan vs 135 días). No se detectaron diferencias significativas en la mortalidad, ni en eventos adversos a los 6 meses. Se detectó una tendencia no significativa hacia unos mejores resultados con el Swan en los centros con mayor número de pacientes enrolados y mas amplia experiencia con el Swan.
Los resultados avalan un uso altamente selectivo del Swan, limitándolo a centros con experiencia en pacientes que no responden a la terapia guiada por signos clínicos.

ESCAPE Investigators and ESCAPE Study Coordinators. Evaluation study of congestive heart failure and pulmonary artery catheterization effectiveness: The ESCAPE trial. JAMA 2005; 294:1625-1633.