La rosiglitazona mejora el control glicémico y reduce los niveles de insulina circulante al incrementar la sensibilidad a la insulina. Los estudios experimentales en animales indican que también inhibe la migración y proliferación de las células musculares lisas vasculares por sus propiedades antiinflamatorias. Por ello, Choi et al. decidieron investigar si reducía la incidencia de reestenosis intra-stent en diabéticos (los diabéticos tienen una tasa de reestenosis intra-stent a los 6 meses cercana al 50%).

Un total de 93 pacientes diabéticos tipo 2 que iban a ser sometidos a implantación de un stent fueron asignados al azar a tratamiento con rosiglitazona o con placebo durante 6 meses. La tasa de reestenosis en la coronariografía realizada a los 6 meses de la implantación del stent era del 12% en el grupo de la rosiglitazona y del 47% en el grupo placebo. En los pacientes tratados con rosiglitazona disminuyeron significativamente todos los marcadores de inflamación.

Aunque el estudio no permite dilucidar el mecanismo de la acción beneficiosa de la rosiglitazona, los investigadores creen que se debe a su acción antiinflamatoria que reduce la migración y proliferación de las células musculares lisas vasculares. Se precisa realizar un estudio mas amplio con end points clínicos antes de que estos hallazgos puedan trasladarse a la clínica.

63º Sesiones Científicas Anuales de la Asociación Americana de Diabetes, Nueva Orleans Jun-03.