Introducción:La AEMPS publicó en octubre de 2011, una nota informativa acerca de las nuevas recomendaciones de vigilancia y control de la función renal en pacientes, antes de iniciar el tratamiento con dabigatrán (Pradaxa®) y a lo largo del mismo.
El dabigatrán es un anticoagulante oral, inhibidor de la trombina, autorizado en abril de 2008. La aparición de episodios hemorrágicos en pacientes bajo este tratamiento, es una posible reacción adversa conocida y frecuente. En los ensayos clínicos se observaron en el 14% de los pacientes tratados en cirugía de cadera o de rodilla y en el 16,5% de los pacientes tratados con fibrilación auricular. Dado que la eliminación de dabigatrán se realiza mayoritariamente por vía renal, la insuficiencia renal, entre otros, constituye un factor de riesgo para la aparición de episodios hemorrágicos. Su uso está contraindicado en pacientes con insuficiencia renal grave.
Adicionalmente, existen otros factores que incrementan el riesgo de sangrado durante el tratamiento con dabigatrán como son la edad >75 años, insuficiencia renal moderada, bajo peso corporal, interacciones farmacocinéticas y farmacodinámicas con otros medicamentos, o patologías que comportan riesgo hemorrágico.
Desarrollo: Se han notificado en Japón varios casos mortales de hemorragias en pacientes tratados con dabigatrán. Se trataba de pacientes de edad avanzada (de 70 a 100 años), y algunos de ellos padecían insuficiencia renal grave, que constituye una contraindicación del uso de dabigatrán en Europa. Como consecuencia, las agencias de medicamentos europeas han revisado la información disponible sobre los casos de hemorragias notificados con dabigatrán.
La conclusión de esta revisión ha sido que, con objeto de minimizar el riesgo de hemorragia, no deben tratarse con dabigatrán pacientes con insuficiencia renal grave, siendo necesario ajustar la dosis en aquellos con algún deterioro de la función renal. Para ello, ésta se debe valorar en los pacientes antes de iniciar el tratamiento y durante el mismo, siendo especialmente relevante en pacientes de edad avanzada, en aquellos que pudieran tener insuficiencia renal no diagnosticada o en situaciones clínicas que puedan conducir al deterioro de la función renal.
Por tanto, el Comité de Medicamentos de Uso Humano (CHMP), comité científico de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), ha recomendado modificar la ficha técnica de Pradaxa® con objeto de intensificar las precauciones relativas al control de la función renal en pacientes candidatos al tratamiento con dabigatrán o que ya lo están recibiendo.
Conclusión: En definitiva, la AEMPS recomienda a los profesionales sanitarios seguir estrictamente las nuevas recomendaciones de control de la función renal en los pacientes en tratamiento con dabigatrán, o candidatos al mismo, así como valorar otros factores de riesgo de hemorragia, seguir las precauciones de empleo del medicamento y vigilar las posibles interacciones farmacológicas, descritas en la ficha técnica de Pradaxa®.
Las nuevas recomendaciones de control de la función renal son las siguientes:
-Antes de iniciar el tratamiento con dabigatrán debe evaluarse la función renal en todos los pacientes, calculando el aclaramiento de creatinina (ACr), con el fin de excluir a pacientes con insuficiencia renal grave (ACr<30 ml/min).
-Durante el tratamiento, debe evaluarse la función renal en determinadas situaciones clínicas cuando se sospeche que la función renal podría disminuir o deteriorarse (hipovolemia, deshidratación, uso concomitante de determinados medicamentos).
-En pacientes mayores de 75 años o en pacientes con insuficiencia renal moderada o leve, debe evaluarse la función renal al menos una vez al año.